La comarca de la Janda se caracteriza por su riqueza gastronómica en general, pero particularmente todas las localidades que la componen cuentan con una importante tradición repostera, de dulces y panes que gozan de un inmenso prestigio y admiración.
La cultura repostera y panadera de pueblos como Medina Sidonia, Alcalá de los Gazules o Benalup- Casas Viejas forma parte de la historia y de la identidad colectiva como comarca. Una trayectoria vital donde, a lo largo del tiempo, se han ido pasando entre diversas familias, generación tras generación, obradores y hornos de pan, algunos de ellos también pastelerías, cuyos saberes y recetas han sabido mantenerse como parte de la tradición familiar y la esencia en la elaboración de estos excelentes productos que elevan a la Janda al Olimpo de los dulces y el pan, fundamentalmente el “pan de campo”, “pan de pueblo”, “pan cateto” o “pan moreno” como popularmente se le conoce. Aunque no debemos olvidar otros tipos o variedades de pan muy famosos y que gozan de gran prestigio en toda la provincia como son los molletes con matalahúva o con anís, así como los picos y una repostería y dulces como las tortas de aceite, magdalenas o “la torta a pellizco” de Alcalá. Todo ello se elabora en las magníficas panaderías, hornos y obradores de pan de nuestra comarca.
Se trata del pan de siempre, pan hecho en horno de leña, de elaboración artesanal, con harina de primera calidad y con el sabor del auténtico pan de pueblo, el magnífico y rico pan de la Janda.
En cuanto a la repostería en la comarca de la Janda tiene nombre propio, Medina Sidonia, donde es uno de los grandes atractivos turísticos y culturales de la localidad durante todo el año, pero sobre todo en el periodo otoñal, previo a las navidades.